Una flor improbable??... una flor imposible??... sólo diferente...??
Haremos un alto... dejaremos de hablar del cerebro, de sus trucos químicos y eléctricos (no del todo, claro...) y haremos unas pocas lecciones más entretenidas. Entretenidas, no "ligeras o mediocres". Resulta complicado hablar de la anatomía y la fisiología sexual femenina sin que el lenguaje descienda al estercolero de los lugares comunes, los tópicos y los prejuicios que nada aportan sino confusión; es muy delgada la línea que separa lo vulgar de lo "vulgar". Tampoco lo es contar "la verdad", ofrecer información veraz y útil para todos (en este caso para los varones), en un lenguaje comprensible (y alegre¡!) y que, además sea lo suficientemente "delicado y tierno" como para que a ninguna mujer le desagrade. Al final se verá si lo hemos conseguido. Vamos allá. Por cierto, la fotografía de arriba podría referirse a un "un coño", todo depende de los versos que la acompañen...
ADVERTENCIA (1ª): hemos tenido la precaución de poner en la entrada de este blog un "Content Warning", "Advertencia de Contenido", para informar que estas lecciones contienen imágenes de "sexo explícito", y que las personas con edad suficiente decidan si quieren acceder al contenido. A pesar de ese aviso inicial y del que siempre incluimos al final de las lecciones, seguimos recibiendo quejas de personas que "se sienten ofendidas por las imágenes y los textos de este blog". Pero... qué más podemos hacer?? si lo que pretenden es ejercer algún tipo de presión dirigida a la censura previa o que nos embargue algún sentimiento de culpabilidad; pierden el tiempo. "Somos agnósticos, panteístas (no creyentes) y profundamente Spinozianos¡! no estamos influidos por ningún tipo de prejuicio religioso y no dejaremos de extender el conocimiento, sobre todo en lo relacionado con el sexo". Todos los que siguen este blog saben que utilizamos material científico pero no siempre el "lenguaje científico"; así que seguiremos nombrando a cada elemento o acción de forma que nadie tenga que consultar la Enciclopedia Británica para saber de qué coño hablamos. Por cierto, lo de la imagen de la izquierda también es un coño. Pero que es un coño??
Flor de loto blanco o "Padma"
Los lotos y los nenúfares, de la familia de plantas acuáticas Nymphaeaceae, han estado (y están) relacionadas y a veces son identificadas, con las ninfas, los labios menores de la "vulva" (en adelante, siempre: "coño") y se consideran "flores sagradas" en, India, China, Japón, Corea, Camboya, Vietnam y antiguamente también en Egipto. Esto es así debido, entre otras creencias, a que en el budismo se considera que las mayores divinidades nacieron del loto; también por su longevidad y por su capacidad para soportar un continuo ambiente húmedo, pueden vivir dentro del agua (totalmente o en parte); y por la asombrosa capacidad de germinación de las semillas de algunas variedades (se han encontrado semillas de loto en antiguas tumbas egipcias y han germinado sin problemas después de 30 siglos...); también porque algunas de sus variedades son hermafroditas. "Om mani padme hum", es probablemente el mantra más famoso del budismo. el significado es "la joya en el loto"
ADVERTENCIA (2ª): a partir de este punto, las imágenes que se utilizan para ilustrar los textos y las definiciones, "es seguro que excitarán sexualmente" a cualquier varón heterosexual (o bisexual), sano; así como a cualquier mujer homosexual (o bisexual), sana.
DEFINICIÓN: sin que sirva de precedente y sólo por demostrar (menuda tontería...) que somos capaces de hablar como ginecólogos lo escribiremos en lenguaje técnico; se denomina "vulva" (del Latín vulvae) y se refiere al "conjunto de los órganos sexuales primarios externos de los mamíferos hembras; en este caso a hembras homo sapiens sapiens y son: Monte de Venus, Labios Mayores, Labios Menores (o ninfas) y Clítoris. (pueden verse las imágenes descriptivas en los links de Wikipedia que siempre incluimos, pero carecen de la calidad de las fotografías que aportamos, como la foto superior que muestra un coño con todas sus partes visibles, menos el clítoris). DENOMINACIONES: como ya dijimos, en castellano la palabra técnica es "vulva", pero en realidad, fuera de los ámbitos científico-sanitarios, no se usa. También se denomina erróneamante: "vagina", pero la vagina es un órgano interno. En el lenguaje literario coloquial culto se nombra como "coño" (del Latín: Cunnus). Ahora... un poco de buen humor y alegría (recordad, el sexo debe ser sobre todo, un juego y para poder disfrutarlo es necesario "desacralizarlo" porque no tiene nada de sagrado). La palabra "coño" tampoco es la más usada en el lenguaje popular; sólo en castellano las denominaciones son casi innumerables, pero podemos recordar algunas muy divertidas: "chocho" es una de las más utilizadas en España, junto a: "raja, almeja, chichi, potorro, felpudo" y "conejo" (usado como logotipo de la revista Play Boy). Esta última en el mismo sentido que en otros idiomas se usan diminutivos de "gato": en inglés "pussy", en alemán "muschi" y en francés "chatté", identificando la suavidad del vello púbico con la de la piel peluda y suave de estos animales. Generalmente, en España se usan mucho los diminutivos de los anteriormente mencionados (coñito, coñín, chochito, rajita, almejita, conejito), siempre en tono cariñoso, de la misma forma que a la ropa interior femenina (se dice: braguita, independientemente de la talla de la mujer). Y con el mismo sentido cariñoso se usan los aumentativos (chochazo o coñazo... aunque esta última también tiene otros usos). Sin abandonar el castellano, en el mundo hispanohablante tiene otras denominaciones populares: "chucha" (Perú, Colomba y Chile), "concha" (se usa en Argentina, Perú y Chile en sentido peyorativo...) y "cuca" (malsonante en Ecuador, Venezuela, Panamá, Colombia). En Perú y Ecuador, la palabra "chocho" se refiere a una planta leguminosa que se usa para cocinar cebiche de chochos. En España, cualquiera de los apelativos mencionado sólo es peyorativo si va unido a "madre". Los varones españoles utilizan muchas otras denominaciones propias del resto de idiomas peninsulares (Catalán, Euskara y Galaico-Portugués) y otros dialectos regionales. También se utiliza el apelativo genérico: "flor" sobre todo en cuando la mujer es muy joven (aludiendo a la función que desempeña en la reproducción) u otorgándole un nombre específico de una flor: "amapola" y "jazmín" (por el poder adormecedor de esas flores). Así como: "capullito" (refiriéndose al clítoris como homólogo del extremo del órgano sexual masculino "capullo". Esta palabra también se usa de forma suavemente peyorativa para referirse a los varones jóvenes indicando que piensan más con la "polla" que con el cerebro). Lo complicado es explicar a una mujer (a veces lo preguntan...) "por qué un varón se refiere al coño como: coñito, coño o coñazo"; porque no existe una norma fija, cuando en un grupo de hombres habla de mujeres (en un momento u otro de cualquier conversación o reunión, se hablará de ellas), siempre se habla de sus atributos femeninos, claro, pero al contrario de lo que se da por sentado; no sólo hablarán de sus tetas, su coño y su culo, eso es un tópico y como tal, falso). Y aunque lo hiciesen, aunque hablasen en tono vulgar de esos atributos, lo cierto es que "la primera idea erótica que el cerebro de un varón capta cuando tiene un encuentro con una mujer, proviene de sus ojos (de su mirada) y sobre todo, de su boca¡! y del tono de su voz".
La mirada y el gesto de la boca... foto: José Montao
Es la mirada de ellas, su boca (el gesto de su boca) y el tono de su voz, lo que desencadena toda la descarga de estímulos y fantasías (inevitables) que llegan, irremediablemente, después. Y es a partir de este momento siempre erótico (es imposible que no exista un componente erótico entre un hombre y una mujer, otra cosa es que por parte de los dos o por la de uno de ellos, se reprima con más o menos determinación), cuando en el cerebro del varón "se recrea una imagen interna de esa mujer, una imagen a la que se desnuda"; y es a esa imagen, no a la mujer real, a la que se le atribuye: coñito, coño o coñazo. No suele estar relacionado con la estatura, la talla u otros elementos externos; sólo con su boca... Pero estos (ojos, mirada, boca, tono de voz y olor...) son temas de siguientes lecciones. Hoy hablamos de coñitos, coños y coñazos. Es el tamaño de la boca, la forma de los labios, el gesto que adoptan en cada momento, lo que marca "la imagen virtual en la mente de los varones, y a la que desnudan". La estatura, el tamaño de las tetas, la envergadura de la cadera, la firmeza de los glúteos, sólo es importante cuando el varón (y esto si está muy marcado por elementos como su etnia y su cultura), se centra en esos atributos y los valora más allá de la erótica... Una parte del cerebro humano (la reptiliana) no sabe nada de erótica¡! en el varón, valora exclusivamente elementos genéticos: "es fuerte?? será buena madre?? la descendencia tendría buenas posibilidades de adaptación?? sobrevivirán??". Y por último, hay que decir que lo que estamos haciendo en esta lección al escribir los pies de foto; es una "valoración posterior"... nombramos coños que "estamos viendo" en unas fotografías¡! y por tanto el mecanismo cerebral no funciona de la misma forma... pero... y esto también es interesante, por eso el coño es tan importante; los varones (los machos), también hacemos "valoraciones regresivas*". Para decirlo de forma sencilla (aunque trataremos sobre este mecanismo erótico en otras lecciones): "nuestro cerebro puede reconstruir la imagen de un coño (que no vemos) a partir de la mujer que tenemos delante (o de la que vemos en la televisión, el cine, una publicación o Internet)" y; también hacemos lo contrario: "reconstruir una imagen completa de una mujer a partir de una imagen que sólo nos muestra su coño¡!". Por eso es tan importante el vestido y sobre todo la ropa interior. Ya hablaremos de eso en otra ocasión... Y... las mujeres deberían saber que todas las definiciones que hemos ofrecido (y otras de las que no hemos hablado) acerca del coño, todas, en la mente del varón (heterosexual y sano, psicológicamente sano), están asociadas con un componente de "protección", íntimamente relacionado con la "ternura y la confianza". Este tipo de varones siempre piensan que el coño es algo "tierno y fuerte"... el coño tiene relación íntima con su vida¡! (porque a ellos les parieron y eso permanece en su memoria); tiene una relación íntima con otras vidas que pueden comenzar y terminar en él¡! y sienten que deben cuidarlo, tratarlo con delicadeza, con cariño, y en ciertos momentos (una vez adquirido el permiso) también con la fuerza de sus propios glúteos. Estos varones "consideran que cuando una hembra le da* su coño, lo comparte, le está haciendo un regalo (en realidad un préstamo) al que rodea una mujer entera, una hembra, y por lo tanto debe protegerla y mostrar adoración por ese regalo". En otros varones, existe en sentimiento de propiedad y exclusividad sobre ese coño y todo lo que le rodea... pero esto es cultural (y perverso...), una interpretación errónea de los conceptos anteriores. Es cierto que las mujeres a veces desean ser "poseídas", pero se trata de otro tipo de posesión, "que no compromete en nada su libertad de elección".
AVISO: las obras y autores que mencionamos y enlazamos, representan material científico, divulgativo y artístico, que mantiene tesis (estudios y estadísticas), a veces opuestas a las que enseñan (y/o imponen) las religiones monoteístas. Son contrarias al concepto de creacionismo, las teorías del diseño inteligente y la fe. Por tanto, si no quieren verse gravemente ofendidos en su sensibilidad o confundidos entre sus creencias y la realidad científica; deben evitar leer estas lecciones.
Este texto se licencia bajo Creative Commons: se puede copiar, mejorar y distribuir; siempre que sea sin ánimo de lucro y atribuyendo la autoría de los diversos contenidos a sus creadores, tal como se hace en este mismo documento.
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Ankalima
Por qué vendemos tan barata nuestra libertad ?? Por qué no perseguimos nuestros sueños con más ahínco ?? Por qué no amamos más ??
miércoles, julio 18, 2012
Sexo para torpes... Amor para despistados (lección 18ª)
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